Eddie Vedder hace un cameo en 'Portlandia'

Portlandia es una serie escrita y protagonizada por Carrie Brownstein, de Sleater Kinney, y el cómico Fred Armisen. La trama gira alrededor de Porland, "la ciudad donde el sueño de los noventa sigue vivo y el gobierno de Bush nunca existió". Una sátira de lo que queda del grunge y el alt en un lugar que presume de ecologista, donde es fácil ser vegano y que cuenta con el mayor número de librerías independientes y cervecerías artesanas de Estados Unidos. Una urbe progresista en la que están prohibidas las bolsas de plástico, con un  alcalde  gay, que en la serie es interpretado por Kyle Mclahan, y donde han ido a parar músicos de todo pelaje, atraidos por el ambiente artístico y, según cuentan, por los bajos precios de los alquileres.

Peligro, famosos en el avión

La relación entre aviación comercial y celebridad es larga y llena de turbulencias, como una cena con los suegros o una rueda de prensa de Mourinho (a éste no lo pongo en negrita, me lo prohíbe mi religión).  Y es que, por norma general, a las celebridades no les gusta que les digan lo que tienen que hacer, y hoy no existe lugar en el mundo en el que más órdenes reciba uno que al embarcar en un vuelo comercial. A Jonathan Rhys Myers le vetaron en United Airlines por beber y perder el control –cuando se negó a engordar en Los Tudor, a ningún productor se le ocurrió echarlo-, Naomi Campbell salió de un vuelo de British Airways esposada tras haber insultado a la tripulación y escupido a un policía y Melendi se puso tonto en un vuelo a México programado en horario nocturno y el avión tuvo que volver a Barajas antes de que los bares cerraran. Recientemente, a Whitney Houston le dio un ataque de ‘diva’ y se negó a abrocharse el cinturón de seguridad, forzando a la azafata a realizar tan complicada operación por ella. Gerard Depardieu quería orinar y, ante la imposibilidad de hacerlo en el lavabo de la aeronave, operó dentro de una botella de agua en medio del pasillo. He aquí otros ejemplos de desencuentros recientes entre estrellas y aviación comercial. Se confirman sus sospechas: este es un texto de alto valor intelectual.

'Arrested Development' y otras resurrecciones televisivas

El anunciado regreso de la comedia Arrested Development a través del portal de Internet NetFlix confirma un modelo de negocio inédito en la televisión estadounidense. Los canales de nuevo cuño intentan desde hace tiempo competir con las grandes cadenas en abierto. Las fórmula para ganarse la confianza de los espectadores es la de recuperar para ellos sus series más adoradas cuando ya han sido canceladas -como Buffy Cazavampiros o Damages-. Así es como estas novedosas formas de televisión cambian las reglas del juego y se abren paso en el fructífero mercado audiovisual. Había ocurrido con los servicios por satélite pero nunca hasta ahora en la Red. El espectador, esta vez sí, cambia el botón de su mando a distancia por el ratón de su ordenador.

Serie en peligro, fans al rescate: 'Community'

Carteles para captar nuevos espectadores (vía @MattGrippi)

La decisión de la cadena NBC de sentar en el banquillo a Community a partir de enero ha recuperado la tradición seriéfila de montar una campaña de apoyo para invitar a la cadena de turno a que reconsidere su decisión. Community no está cancelada y desde NBC no se cansan de repetir que la comedia volverá a la parrilla en algún momento de 2012 y que incluso podría ser renovada por una cuarta temporada. Los fans, que son por lo general de naturaleza incrédula, no se fían y llevan desde el miércoles agudizando el ingenio para defender la supervivencia de la comedia.