cine, star wars, la guerra de las galaxias

Por “muy muy lejana” que fuera aquella galaxia, lleva más de 30 años seduciendo nuestro planeta. Seis películas, decenas de videojuegos y libros, objetos de merchandising a go-go, series de televisión, una banda sonora celebérrima y un ejército de fans que acuden a todo mitin disfrazados de soldados de asalto o de Wookie dan fe del éxito de La guerra de las galaxias. En ese universo de naves espaciales y espadas láser, un desconocido dentista italiano ha sabido encontrar su sitio bajo el sol. O más bien, vistos los resultados, bajo los dos soles de Tatooine. Angelo Licata es el director de Dark Resurrection, filme amateur inspirado en el mundo de La guerra de las galaxias que ha arrasado en la Red.
Seguir leyendo
Ruben Östlund, Play, L'apollonide, Bertrand Bonello

Día ajetreado ayer en Gijón con un buen número de citas cinéfilas y resultados desiguales. Para empezar la mañana se proyectó Play, un aterrador retrato de la sociedad sueca (extrapolable a cualquier otra) con base en la crónica de sucesos: una serie de niños de 12 a 14 años se dedicaron entre 2006 y 2008 a robar a otros niños. La cosa se repitió más de 60 veces hasta que la policía de Goteborg tumbó el entramado. Estos atracos, sin rastro de violencia física, y sustentados en la presión psíquica sobre la víctima le sirven al director Ruben Östlund (en la foto) para trazar un relato tensado como la cuerda de un piano donde toda la intimidación se dirime en terrenos poco habituales, más relacionados con la cultura del miedo y sus consecuencias que con la agresión pura y dura. Play no abusa de estos elementos y en cierto modo se limita a la observación de un hecho que escandalizó a los suecos hace poco menos de tres años sin tratar de pontificar o sacar conclusiones. Posiblemente ahí resida la auténtica fuerza del relato: la certeza de que estamos cerca –demasiado cerca- del caos y de que éste empieza por el eslabón más débil, el que integran todos los que crecen en un mundo donde los valores habituales han sido sustituidos por la ley del más fuerte.
Seguir leyendo
Cine, cortos, reportaje, entrevista

Como un síntoma de estos tiempos convulsos, la figura del zombie ha recuperado su acepción metafórica original, dando pie a nuevas relecturas políticas, filosóficas y hasta socioeconómicas. Más allá del alegato pacifista y anti-consumista de los muertos vivientes de George A. Romero, las nuevas hordas de cadáveres andantes reflejan los mayores temores de la sociedad occidental con ímpetu renovado. Problemas como la inmigración, el paro, las personas sin hogar o las víctimas de guerras, epidemias y catástrofes naturales adoptan los rasgos de alienados seres sin alma, ávidos de carne fresca en un mundo cada vez más tecnificado y deshumanizado.
Es por esto que el zombie pertenece hoy, más que nunca, al ámbito de lo cotidiano y su presencia es cada vez más habitual, no solo en el cine, sino también en las parrillas televisivas (The Dead Set, The Walking Dead), estanterías de best-sellers (Guerra Mundial Z, Orgullo y Prejuicio y Zombies) y consolas de videojuegos (Resident Evil, Left 4 Dead). Incluso han llegado a dar un paso más allá, liderando una cruzada integrista contra los vivos en Zombinladen, un asombroso cortometraje que en cuestión de pocos meses se ha convertido en la última sensación de la blogosfera.
Seguir leyendo